Contáctenos
- Refugio Street 1, between Monserrate and Zulueta, Av. Bélgica, La Habana 10600, Cuba
- +34 (07) 8601524
El Museo de la Revolución se encuentra albergado en el antiguo Palacio Presidencial, construido entre 1913 y 1920 y utilizado por varios presidentes de Cuba, de los que el último fue Fulgencio Batista. La afamada Tiffany’s de Nueva York decoró su interior.
Historia y arquitectura del Museo de la Revolucion
En 1909, el gobernador general Aubert decidió construir una nueva sede para el gobierno provincial donde solía estar la antigua muralla de la ciudad. El diseño fue de los arquitectos Rodolfo Marurí (Cuba) y Paul Belau (Bélgica) y la construcción se encargó a la Compañía de Contrataciones Generales con un costo de más de 1,5 millones de pesos.
A fines de 1917, la primera dama Mariana Seva quedó cautivada por la magnificencia y la magnífica ubicación de este edificio. A través de maniobras legales, su esposo, el presidente Mario García Menocal, tomó posesión del edificio, aún en construcción, alejado del Gobierno Provincial y para 1918 se convirtió en el Palacio Presidencial. Las obras finalmente se terminaron en enero de 1920 y el edificio fue inaugurado oficialmente.
La opulencia del edificio contrasta con su entorno. Un ejemplo es la escalera principal de mármol de Carrara. Los muros exteriores son de piedra y los muros interiores de hormigón armado. Curiosamente, la cúpula de azulejos policromada, acabada en terracota, con sus cuatro pechinas (decorada por E. Valderrama y M. González) no formaba parte del diseño original. La decoración de interiores, de Tiffani Studios, es impresionante con piezas de los reconocidos artistas cubanos Armando Menocal y Antonio Rodríguez Morey.
Esta monumental edificación ubicada en Centro Habana alberga uno de los museos más interesantes de toda Cuba y es visita obligada, especialmente para todo aquel que sienta curiosidad por la historia de Cuba.
El museo exhibe diversas exposiciones y colecciones que muestran fotografías, banderas, documentos, armas y otros objetos relacionados sobre la lucha revolucionaria contra Batista y la historia de Cuba, en orden cronológico, que van desde la cultura precolombina de Cuba (en la última planta) hasta el régimen socialista actual. Destacan las exposiciones sobre el asalto de Moncada de 1953 y sobre la vida del Che Guevara, que se muestran en las habitaciones inferiores.
En la entrada al museo hay un fragmento del antiguo muro de la ciudad, así como un tanque SAU-100 que fue utilizado por Castro durante la invasión de la Bahía de Cochinos de 1961.
Pabellón Memorial Granma
Detrás de la edificación se encuentra el Pabellón Memorial Granma, un homenaje al yate de 13 metros de eslora que fue utilizado para trasladar a Fidel Castro y al Che Guevara junto a otros 80 revolucionarios desde Tuxpan (México) hasta Cuba en 1956. El barco se exhibe dentro de una gran urna de cristal. Este pabellón se encuentra rodeado por avionetas y otros vehículos relacionados con la Revolución y es accesible desde el propio Museo de la Revolución.
El edificio es una parte importante de la historia cubana posrevolucionaria. Tras el triunfo de la Revolución, de 1959 a 1965, el edificio albergó tanto al Gobierno como al Consejo de Ministros y en 1965 se conformó en el todavía Palacio Presidencial el Comité Central del Partido Comunista de Cuba. En 1974 se convirtió en museo dedicado a la Revolución Cubana y dos años después fue testigo de la aprobación de la Constitución de 1976. En 2010 fue declarado Monumento Nacional.
Para los visitantes
Las mundialmente famosas Tiffany’s de Nueva York decoraron el interior. Destacan aquí el Salón de los Espejos, que es una réplica del Salón de los Espejos del Palacio de Versalles, y el Salón Dorado, realizado en mármol amarillo con relieve dorado en las paredes. Cuatro lienzos de Esteban Valderrama y Mariano Miguel González montados sobre láminas de oro de 18 quilates adornan las paredes. Hay exposiciones permanentes sobre la historia de las luchas cubanas desde el siglo XV hasta la actualidad, incluida la pipa del Che Guevara y el uniforme del cosmonauta cubano Arnaldo Tamayo.
En marzo de 1957, el palacio fue objeto de un fallido intento de asesinato contra Batista dirigido por el líder estudiantil revolucionario José Antonio Echeverría. Los agujeros de bala del intento fallido aún son visibles en la escalera principal del Palacio.
El museo en sí desciende cronológicamente desde el piso superior comenzando con la cultura precolombina de Cuba y extendiéndose hasta la actualidad. Las salas de la planta baja tienen algunas exhibiciones interesantes sobre el ataque del Moncada de 1953 y la vida del Che Guevara. La mayoría de las etiquetas están en inglés y español. Frente al edificio hay un fragmento de la antigua muralla de la ciudad, así como un tanque SAU-100 utilizado por Castro durante la batalla de Bahía de Cochinos en 1961. Una sala está dedicada al llamado Período Especial.
Detrás del museo (y incluido en el precio de la entrada) está el Pabellón Granma, un monumento al yate de 18 metros que llevó a Fidel Castro y a otros 81 revolucionarios de Tuxpán, México, a Cuba en diciembre de 1956 para lanzar la Revolución. El barco, expuesto tras un cristal, está rodeado de aviones, vehículos y armas utilizadas durante las guerras revolucionarias contra Batista y en la Batalla de Playa Girón (Bahía de Cochinos).
Aún no está clasificado.
¿Por qué no registra sus opiniones?